Realice ejercicio físico
Nuestros músculos se vuelven más fuertes cuanto más los utilizamos. Ocurre lo mismo con los huesos.
Las actividades que implican cargar el propio peso, como caminar, correr, saltar y trepar son muy buenas para tener unos huesos fuertes. Usan la fuerza muscular y la gravedad para ejercer presión sobre nuestros músculos. Esta presión hace que el cuerpo fortalezca los huesos.
Actividades como montar en bicicleta o nadar no ejercen esta presión de soportar el propio peso. Son geniales para mantener la salud corporal en general, pero los niños también necesitan practicar algún tipo de ejercicio que suponga cargar el propio peso.
Tome suplemento de vitamina D
Los profesionales de la salud recomiendan que todos tomen suplementos de vitamina D si no ingieren una cantidad suficiente de este mineral en la dieta.
Coma alimentos ricos en calcio
El calcio es un mineral bien conocido por ayudar a tener unos huesos sanos. Se encuentra en los lácteos, las alubias, ciertos frutos secos y semillas y la verdura de hoja verde. Se añade a menudo a alimentos como el jugo de naranja o los cereales.
Cinthya R
Créditos : Andina